Portada |
No-Cooperación |
Publicaciones |
Derechos Humanos |
Prisioneros políticos
Vídeos |
Proyectos de la oposición |
Proyectos Auxilio y CEON |
Cuba: Mito y Realidad
» Derechos Humanos
ENTREVISTA A ROBERTO DE MIRANDA HERNANDEZ Presidente del Colegio de Pedagogos Independientes de Cuba excarcelado el 23 de junio de 2004. Realizada por el Directorio Democrático Cubano y entregada a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la OEA. ¿Qué día fue Ud. detenido y en qué condiciones? El 18 de marzo del 2003 a las 3 de la tarde, mi casa fue rodeada por un dispositivo de casi 20 hombres, empezaron a requisar ocupando libros, una máquina de escribir vieja, lo que más nos dolió en aquellos momentos fueron los trabajos de los niños que estaban expuestos en la Biblioteca Independiente Félix Varela. Con qué saña, con qué odio se llevaban esos trabajos, o sea los ocupaban, los medicamentos que teníamos, nuestros ahorros de toda una vida de nuestra familia, incluso un dinero que un hijo que tengo en España había enviado para que su mamá fuera a verlo. Fue algo muy doloroso, no sólo fue mi casa, sino en la casa de una anciana que con nosotros ha tenido las mejores relaciones. ¿A dónde fue llevado Ud. después del arresto? El arresto comenzó como a las 3 ó 3:30 de la tarde, terminó prácticamente a las 3 de la mañana, fui llevado a Villa Marista, me despojaron de todo lo que tenía, mis documentos. Allí estuve hasta el día del juicio, no recuerdo ahora la fecha, en el juicio unos 10 ó 15 minutos antes del juicio, vi al abogado que me iba a defender, creo que lo único que me dijo fue que yo era anexionista, yo le dije Doctor yo nunca he sido anexionista, esas fueron las única palabras que tuve con el abogado. ¿Cuántos días estuvo Ud. sometido a interrogatorio? Creo que alrededor de 20 días, no recuerdo bien. ¿Estaba Ud. en comunicación con su familia durante este tiempo? Sí, los martes nos daban una visita de 15 minutos, no recuerdo bien, siempre con un oficial presente. No podíamos hablar nada, yo me vengo a enterar en el hospital militar, que fue adonde fui llevado porque me puse con la presión muy alta, mucho dolor en pecho, y me ingresaron en la sala intensiva del hospital Carlos J. Finlay, donde estuve ingresado uno o dos días más, no recuerdo muy bien. ¿En qué momento supo que iba a ser procesado con otro gran número de otros activistas y periodistas? Después con el transcurso de los días mi familia me lo informó que no era yo sólo, yo pensaba que era yo sólo, y hasta me nombraron muchos hermanos que yo conocía: Carmelo, Pedro Pablo, Marcelo, o sea me nombraron a todas estas personas, y una tarde me sacan de la tapiada y me llevan a un despacho, allí estaba una secretaria del ministerio fiscal, del ministerio de justicia, y me da a firmar un acta donde me pedían 25 años. Imagínate, una persona que nunca había sido procesada, que en mis antecedentes penales no consta nada de robo ni nada, que es un delito político. Y yo le pregunté, ¿esto es por tener libros, por pensar diferente me van a echar 25 años? y la mujer me abrió los ojos y se quedó asombrada. ¿Cuáles son las razones de acuerdo a Ud. por las que fue detenido y procesado? Realmente me detienen por disentir del gobierno, por haber hecho el Congreso de Educadores, concursos de libros y pinturas, pensar diferente, decir siempre que educar no es adoctrinar, esa ha sido la razón. ¿Cómo puede Ud. describir las condiciones de su juicio? Déjame decirte que en el juicio yo no permanecí todo el tiempo. A mí me juzgaron con los hermanos gestores del Proyecto Varela. Regis (Iglesias) me dice: “Roberto estás muy colorado”, entonces llaman a un médico y el médico me toma la presión, una doctora, disculpa. Y tenía 200 con 150, de allí me sacan urgente para el hospital como te había dicho, para la sala de cuidados intensivos del hospital. ¿Después del juicio, cuándo y adónde fue Ud. trasladado? Después del juicio estuve en la sala de cuidados intensivos del Hospital Militar Carlos J. Finlay. Después pasé a la sala de penados del hospital militar, hasta que fui conducido a Agüica, que después que se fue mi familia a Agüica me trasladaron como a las 2 de la tarde para la Seguridad del Estado y ahí tenía la presión alta y me inyectaron y me llevaron para Agüica. Cuando llegué a Agüica tenía la presión altísima, entonces ellos determinaron que debía permanecer en la enfermería, porque la presión no se me controlaba. ¿Podría Ud. describir las condiciones de su celda y de la prisión donde Ud. fue llevado? Mira, Villa Marista, ojalá las nuevas generaciones, ni las personas que nos han hecho daño pasen por ese lugar, es algo terrible, fíjate si es algo terrible que nunca más he vuelto a conciliar el sueño, duermo dos horas, duermo tres horas, nunca más he vuelto a conciliar el sueño. No quiero que esto se vuelva a repetir, se lo pido a Dios que esto no se vuelva a repetir. No sólo para mi sino para tantos jóvenes. ¿Permaneció Ud. en el mismo lugar hasta su excarcelación? No, en Agüca estuve en la enfermería, el trato de los médicos y el personal paramédicos muy bueno, muy profesionales, cuando los médicos determinaban me llevaban para la terapia intensiva del hospital de Colón donde me ingresaron en dos ocasiones, pero el personal médico muy humano. En el hospital militar de Colón, muchos médicos y enfermeras se acercaban a mí, como solidarizándose conmigo y me apretaban las manos y me decían, pronto esto se acabará. Son cosas que nunca olvidaré, con el cariño que fui tratado. ¿Podría describir las visitas familiares, atención religiosa y las visitas familiares? De Agüica fui trasladado para el Combinado del Este. En el Combinado ya no eran las condiciones de Agüica, en Agüica era un régimen de mayor severidad, me llevaban esposado las veces que fui visitado hasta donde estaba mi nietecito. Esto ha marcado a mi nieto para siempre, mi nieto tiene ahora 7 años. Te digo que esto es algo muy triste, muy doloroso cuando yo llegaba y le pedía de favor a los carceleros que me quitaran las esposas, me decían que no, que tenía que ir esposado, iba solamente esposado de las manos, pero yo argumentaba que no había razón para esposarme, yo soy un hombre mayor, mira las alambradas que hay aquí, yo no puedo brincar uno de esos muros, pero bueno cuando ya llegábamos delante de los familiares me despojaban de las esposas, pero era el trauma de que mis familiares me veían llegar en esas condiciones y el niño sufrió un trauma psicológico que lo marca para siempre. ¿Bajo que condiciones fue Ud. excarcelado si existen algunas? En honor a la verdad, yo fui llevado para el Combinado del Este como explicaba anteriormente, el mismo trato profesional de los médicos o sea el personal paramédico. Me hicieron chequeos de todo, ahí fue donde se vio el problema en el hígado, una cardiopatía, la presión arterial que la misma Seguridad del Estado, un capitán mandó a que me tomaran la presión 200 y ciento y pico de mínima. Yo creo que esto motivó que se pidiera mi excarcelación. La razón de mi excarcelación ha sido mi condición física y que no se quieren anotar un muerto. Habíamos 75 en prisión, pienso yo esta es mi opinión, aunque, en honor a la verdad en el Combinado del Este la atención médica conmigo fue muy buena. ¿Podría Ud. explicar lo que ha significado para su familia su encarcelamiento? Bueno, esto ha marcado para siempre a mi familia, mis nietos, a mis amigos, a mis vecinos. Cuando salí de prisión con qué alegría me recibieron los vecinos. Figúrate 30 años impartiendo clases aquí en esta casa, tengo mucha gente que me quiere, que me saluda. Una cosa muy bonita la solidaridad de los vecinos, se regó la bola de que yo venía, la gente desde los balcones me saludaban, algo muy bonito que nunca olvidaré. Mire, mis hijos y mis nueras han sido víctimas también, pues han sido despedidos de sus trabajos, que no tienen derecho a nada. No sólo a mis hijos, mis nueras, nos han señalado como algo deplorable en la sociedad, siendo personas decentes, por el sólo delito de pensar diferente, nos hemos ganado el título de mercenarios.
Enviar por E-mail | Versión para Imprimir
About the author ![]()
Directorio Democrático Cubano
© Copyright 2008 Directorio Democrático Cubano. Todos los Derechos reservados.
|