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Shakira: Testimonio sobre la tortura en Guantánamo, Cuba
18/02/2009 | Yordis García Fournier


Articulo 5: Todo ser humano tiene derecho a que no se le trate con ofensa ni a ser sometido a torturas ni a tratos crueles, inhumanos y degradantes.

--Declaración Universal de los Derechos Humanos

 

“Shakira, o balancín.” Cualquiera que lea este titulo pensará que se habla de Shakira, esa joven cantante colombiana. Además de eso, le daría la impresión por la palabra “balancín,” por lo menos en el Oriente de Cuba, de verla recostada a un cómodo sillón, quizás tomando el sol mañanero de verano en alguna de sus lujosas residencias en algún lujoso lugar de este mundo.

 

Pero no, la realidad es otra. Cómo bien dice el dicho, las apariencias engañan.

 

La Shakira de este escrito puesto a su consideración es otra. No es la joven hermosa, sexy, sensual, alegre, talentosa y afamada vocalista.

 

Se trata de la Shakira molesta, tortuosa, odiosa, irresistible, repudiada e indeseada por todos los reclusos de la prisión Combinado de Guantánamo- un método de tortura usado a diario ya convertido en algo cotidiano que consiste en esposar a los reos a ambos lados de la cadera en algunos casos, en otros delante y atrás, unida por una cadena que rodea toda la cintura y que los esbirros carcelarios aprietan tanto que apenas se puede respirar.

 

El uso es variable.  En otros casos- que son muchos- la mencionada fémina sufre una increíble mutación.  De la cintura y las manos pasa también a las extremidades inferiores con otro par de esposas de acero en los pies y la cadena prácticamente une las manos y los pies quedando el hombre apoyado solo en la zona abdominal del cuerpo con el piso.

 

A medida que pasa el tiempo llega el cansancio de las extremidades y con ello ambos pares de esposas se van apretando causando severos daños en las muñecas y alrededor de los tobillos, convirtiéndose esto en el llamado “balancín.”

 

Es bueno aclarar que estos métodos son aplicados mayormente por el capitán José Boulí Robles, jefe del orden interior y su segundo José Suárez.

 

Además se comenta que fue una solidaria donación de la hermana República Bolivariana de Venezuela y su represivo gobernante comunista Hugo Chávez Frías a la bloqueada nación cubana.

 

Ya conocido cómo es el uso y por quienes, el método de tortura al estilo de las mazmorras de los tiempos remotos, es preciso conocer las causas que según los oficiales los llevan a aplicarlas y también por supuesto, las verdaderas.

 

La Shakira y el balancín se lo ponen a los presos indisciplinados y violentos que se tornan incontrolables que ya he oído decir a los mencionados gendarmes ante algún reclamo o queja que se le haga en el penal, incluyendo la de quien escribe estas letras, que ha visto muchas veces en vivo y en directo a la tal Shakira del régimen, incluso luego de sufrir su  dolorosa transformación, pero las verdaderas causas son bien conocidas por todos los prisioneros que tanto le temen.

 

Los presos comunes son los que más sufren estos despreciables encadenamientos en la inmensa mayoría de los casos por el sólo hecho de reclamar sus derechos y beneficios, tales como un simple pabellón de visita conyugal, asistencia médica, salir a trabajar por tiempo cumplido como mínima, hablar con el reeducador o con algún directivo del penal.

 

En el intento de reclamo de algunos de estos puntos, luego de lidiar una batalla campal con los consejos de reclusos, los guardias le responden con evasivas y evidentes mentiras, haciendo excelente uso y dominio de la demagogia que los caracteriza e identifica. Las víctimas son conducidas hacia los tenebrosos, húmedos y fríos  calabozos, estratégico lugar solo comparado con los locales de tortura de la antigua dictadura de Batista a los de las dictaduras militares de América del pasado siglo.

 

Por indisciplinado son “enshakirados” y como en algunos casos, amarrados en el balancín por espacio hasta de tres días, teniendo que hacer sus necesidades fisiológicas encima por no tener otra salida.

 

Los presos políticos reciben igual tratamiento por cualquier motivo que las autoridades consideren, como “desorden dentro del recinto penitenciario” a diferencia de que muchas veces citan el grupo musical local para la parte posterior o frontal de los calabozos para que no escuchen las consignas antigubernamentales en franca rebeldía y protesta por tal situación.

 

Muchos son los casos e incontables la lista de los que han sufrido este sui generis método, algo paradójico, pues son anunciados con bombos y platillos por los medios oficialistas los programas adoptados por la revolución cubana para mejorar las condiciones de la penitenciaría de la Isla, al punto de expresar públicamente de que se han convertido en escuelas.

 

Y es más, el gobierno de la Habana vende al mundo una imagen de paladín de justicia, democracia y libertad, cuando realmente a lo largo de estos 50 años de totalitarismo han violado cuantos tratados internacionales existen en materia de derechos humanos, políticos y civiles, aún siendo hipócritamente firmantes de ellos.

 

A pesar de que muchas han sido las quejas de los reclusos y los familiares en contra de estos personeros del régimen por estas prácticas de terrorismos de estado.

 

Lo cierto es que la prisión del Combinado de Guantánamo se continúa utilizando la Shakira y el balancín.

 

Yordis García Fournier, Movimiento Cubano de Jóvenes por la Democracia y de la Alianza Democrática Oriental, prisionero político, prisión provincial de Guantánamo.

 

 

 

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